Buscar este blog

Corazones y jarrones

Un corazón se asemeja mucho a un jarrón:
 Una vez que lo rompes, a propósito o sin querer, no hay vuelta atrás. 
Puedes disculparte e incluso te podrá perdonar, pero seguirá roto. 
Incluso puedes hacer todo lo posible por unir de nuevo las piezas, pero aún así nada volverá a ser tan sólido y bonito como antes.

No hay comentarios :

¿Qué opinas?